Corte rechaza intento de Trump de vetar estudiantes extranjeros en Harvard

Una jueza autorizó a la Universidad de Harvard a seguir aceptando estudiantes internacionales, en medio de una disputa con el gobierno de Donald Trump por sus políticas migratorias, que impactan directamente en los estudiantes extranjeros en EE.UU.
La jueza federal Allison Burroughs sostuvo que el intento del gobierno por intervenir en el funcionamiento de una universidad prestigiosa afectaba la libertad de expresión.
Trump había propuesto limitar el ingreso de estudiantes extranjeros a Harvard como parte de una estrategia para forzar cambios en sus políticas internas. Además, su gobierno recortó más de 2.600 millones de dólares en fondos para investigaciones, canceló contratos federales y amenazó con quitarle beneficios fiscales a la universidad, a la que el expresidente acusó de ser un centro del pensamiento liberal.
Frente a estas medidas, Harvard demandó en mayo al Departamento de Seguridad Nacional, luego de que este le quitara la autorización para admitir alumnos internacionales y emitirles visas. Esta decisión ponía en riesgo a unos 7.000 estudiantes extranjeros, que debían cambiarse de universidad o podían perder su estatus legal en el país.
La universidad argumentó que la medida era una represalia por no cumplir con las exigencias de la Casa Blanca sobre cómo debía manejar las protestas en el campus, sus procesos de admisión y sus contrataciones. Ante esta situación, la jueza Burroughs frenó temporalmente la decisión y el viernes emitió una orden judicial para proteger a la institución.
La tensión se agravó en abril, cuando la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, exigió a Harvard información sobre supuestas actividades peligrosas o ilegales de sus estudiantes internacionales, que representan el 25% del alumnado. Aunque la universidad entregó la documentación solicitada, Noem la consideró insuficiente y, el 22 de mayo, revocó su certificación en el Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio.